Cómo los árboles y los parque ayudan a la longevidad

A medida que muchas de nuestras ciudades van creciendo, también crecen las construcciones residenciales y comerciales acabando poco a poco con las zonas verdes que en muchos casos son considerado como estrategias de embellecimiento más que una necesidad de salud y nuestra supervivencia en la Tierra.

Las autopistas y las palmeras han definido históricamente a Los Ángeles como la segunda ciudad más grande de los Estados Unidos. Sin embargo, nuevas investigaciones y las realidades del cambio climático han impulsado la necesidad de más y mejores espacios verdes, así como esfuerzos para abordar las desigualdades en el acceso a parques y sombra.

En una reunión de lideres y expertos en el tema invitados por Ethnic Media Services expusieron un estudio sobre la importancia del verdor urbano para la supervivencia de los seres vivos y ofrecieron consejos que todos podemos poner en práctica y comenzar el cambio.

Michael Jerrett, Profesor del Departamento de Ciencias de la Salud Ambiental de UCLA y Co-Directora del Centro para Soluciones de Clima Saludable de la Escuela de Salud Pública Fielding, afirmó que un estudio publicado demostró que si todas las áreas del condado de Los Ángeles destinadas a parques (54 acres) se elevaran al nivel medio, la población del condado de Los Ángeles ganaría un total de 171,000 años adicionales de vida, de los cuales los Latinos y Afroamericanos ganarían 122,700 años.

Marcos Trinidad, Director Senior de Árboles en «Tree People», la organización de defensa del medio ambiente más grande del sur de California, presentó los esfuerzos de la organización para mejorar el verdor urbano. El punto clave es clasificar las necesidades de verdor de diferentes regiones y priorizar áreas que necesitan urgentemente ser ajardinadas. Indicó que en el futuro, intentarán un modelo en el que empleados formales y voluntarios trabajen juntos para fomentar una mayor participación comunitaria.

El cambio también empieza con la ayuda de todos, darles la importancia a los espacios verdes, cuidarlos y si es posible sembrar; si fuéramos más conscientes haríamos cambios mucho más rápido y se salvarían muchas vidas.